En la antigüedad el
color rojo era relacionado con el demonio, la sangre y la brujería. Por
ello era un color prohibido en casi todo lo cotidiano. Sin embargo, y
dado que en invierno cuando todo parece estar parado o muerto por las
heladas, el rojo es un símbolo de sangre y, por tanto de vida. El pueblo
y sus supersticiones cree que llevar un símbolo de vida atrae a la buena
suerte, con lo que en el momento en que el sol empieza su renacer
(solsticio de invierno) opta por llevar ropa de color rojo sin que esté
a la vista. |