A
continuación os hablaremos de algunas de las distintas técnicas de
pintura que podremos utilizar.
PINCEL SECO
También
conocido como cepillado. Probablemente ésta sea la técnica más conocida.
Aún así haré una pequeña descripción de la misma. Se utiliza en
superficies que ya tienen textura. Pintamos la superficie con un color
oscuro y uniforme y esperamos a que seque en condiciones. Mojamos el
pincel en un color algo más claro que el de base; retiramos casi toda la
pintura del pincel pasándolo sobre un papel absorbente (nos servirá el
de cocina) y lo pasamos por la superficie a pintar suavemente.
Repetimos la
operación varias veces usando cada vez colores más claros y el pincel
más seco. Cada vez, por tanto, será más difícil que se deposite pintura
y deberemos pasarlo con más fuerza.
MEZCLA
La mezcla
consiste en graduar la transición entre dos colores.
Pintamos las
dos zonas anexas con sus correspondientes colores. Para esta técnica hay
que trabajar con el pincel seco. Para ello eliminaremos los restos de
pintura sobre un papel de cocina, como ya hemos visto en el párrafo
anterior. Usaremos en este caso un pincel plano.
Empezaremos
usando el color más oscuro trazando líneas desde la zona más oscura
hacia la más clara. Eso irá simulando la línea de transición.
Posteriormente repetiremos esta acción dando luces con el color más
claro. Siempre aplicaremos el pincel seco con líneas de la zona de color
usado hacia la otra zona. En este caso del color claro hacia el oscuro.
ESPONJADO
Esta técnica
es muy útil para crear la sensación realista sobre superficies planas o
con poca textura. La técnica aunque sencilla, requiere de práctica para
lograr el efecto esperado.
Sobre la
placa se da un color oscuro de modo uniforme. Posteriormente se aplican
colores cada vez más claros con una esponja que podrá ser sintética o
natural y su porosidad (mayor o menor) deberá ser acorde a la
estampación que deseamos hacer. Podremos tanto aplicar pintura como
retirarla o removerla.
Para que
nuestro esponjado quede perfecto, sólo tenemos que seguir los siguientes
pasos:
-
Humedecer la esponja con agua y escurrirla con fuerza.
-
Cargar
la esponja con pintura y descargar el excedente en un papel
absorbente.
-
Aplicar
sobre la superficie con golpecitos suaves y rotando o moviendo la
mano para que no queden líneas marcadas.
-
Si lo
que queremos hacer es quitar pintura, debemos colocar sobre la
pintura base ya seca el otro color, y antes de que éste se seque,
aplicamos la esponja limpia realizando los mismos movimientos que en
el caso anterior.
-
Por
norma general se suele trabajar de claro a oscuro superponiendo
entonaciones más intensas sobre las más ligeras.
TEXTURIZAR CON PINTURA
Las
aplicaciones consistentes en sucesivos pinceles secos aplicados de forma
no uniforme. Esta falta de uniformidad es la que nos dará el efecto más
realista. A diferencia del esponjado, las aplicaciones se realizan con
un pincel plano y usando colores diversos.
Aplicamos
primero una capa uniforme, las siguientes capas se darán en tonos más
claros y de forma no uniforme. Aquí y allá. Finalmente aplicamos un tono
mucho más claro para resaltar los perfiles.
PERFILADO
Esta es una
técnica muy sencilla y efectiva. Tomamos la superficie que previamente
hemos texturizado y pintado. Tomamos un pincel plano y con una pintura
de color notablemente más claro, lo pasamos por todos los vértices y
aristas.
VELADURAS
Es una
técnica compleja de aplicar en toda su plenitud. Básicamente consiste en
diluir mucho un color (6 ó 7 partes de agua por 1 de pintura) y
humedecer un pincel plano. Posteriormente se seca el pincel sobre un
papel absorbente. Al pasar el pincel por una superficie, dejará un fino
rastro, casi imperceptible. Tras aplicar varias veces esta técnica con
el mismo o distintos colores, se logrará un efecto muy realista.
Se suele
utilizar para simular desgastes.
BAÑO DE COLOR
Consiste en
la aplicación de una capa de pintura o tinta diluida (3 partes de agua
por 1 de pintura). Se puede usar de dos modos: Aplicándola a los
recovecos y esquinas para oscurecer las sombras o de modo general, para
modificar el color de la estructura.
Por ejemplo,
pintamos una superficie con un color claro, hueso deslucido.
Posteriormente hemos disuelto pintura marrón y la hemos aplicado a toda
la superficie. La pintura se ha concentrado en los huecos y ha creado el
aspecto de sombras y luces esperado.
DOBLE CARGA
Esta técnica consiste en lograr que dos colores se fundan
en el centro. Para lograr esta técnica con éxito debemos seguir con
cuidado los siguientes pasos.
Lo primero es colocar los dos colores que deseamos unir
sobre la paleta. Humedecemos el pincel chato con agua y retiramos el
excedente con ayuda del papel absorbente. A continuación cargamos cada
ángulo del pincel con un tono distinto. Ahora pincelamos sobre la paleta
hacia delante y atrás con pinceladas cortas y siempre en el mismo lugar,
hasta lograr que los colores se fundan en el centro. Por último
aplicamos el pincel en nuestro trabajo.
Recuerda que el trabajo es correcto si los colores
aparecen continuos con un fundido progresivo; si está mal realizado
aparecerán dos rayas paralelas de diferentes colores.
ENMASCARADO
Es un formato de aplicación de pinturas dentro de
espacios delimitados por medio de cintas o de masillas, que sirven para
ocultar la zona que queremos quede sin pintar, y que además nos permite
delimitar la pintura a una zona específica, sin que se escape de la
misma.
Para hacer esta técnica nos podemos valer de varios
materiales: masillas, plastilinas, hilos de silicona caliente, pero el
más utilizado por su precio y fácil retirada es la cinta de carrocero.
Una vez definido el diseño colocamos las cintas en la
posición específica y deseada para limitar la pintura. Y a pintar se ha
dicho.
EL RAYE
La característica principal de esta técnica es que nos
deja ver la pintura anterior, dando un efecto añejo a la superficie en
que se aplica.
Para lograrlo se arrastra la segunda pintura con un
pincel de goma o duro, esponja de acero, lija, etc. Sobre una superficie
de color ya seca, se aplica un segundo color previamente mezclado con
retardador o glaseador o diluida con agua simplemente. La idea es que
este segundo color que se aplicará sobre la base tenga poco poder
cobertor. Inmediatamente, se arrastra este segundo color con el elemento
seleccionado, de manera uniforme, del principio al final.
Es conveniente realizar la totalidad del trabajo de una
vez y evitar que la pintura se seque. Si la superficie es muy grande, lo
mejor es trabajar por tramos.
PATINAS
El patinado es una técnica de acabado con la que damos un
aspecto envejecido y gastado a cualquier objeto.
Comenzamos por dar una buena base al objeto para poder
lucir luego la pátina adecuada. Para ello lijamos y pintamos. Si fuese
un objeto muy poroso (madera, yeso, escayola, etc.) daremos antes una
mano de imprimación.
Una vez seca la pintura haremos la pátina. Normalmente se
utiliza cera en pasta, ya sea incolora o con el color elegido,
respetando que sea más oscuro que el color base. La cera la podemos
mezclar con elementos oleosos o secos; la estrella en este terreno es el
betún de judea.
Esparcimos la mezcla con ayuda de un trapo, esperamos
unos pocos minutos para que se fije y procedemos a retirar el excedente. |