Cortaremos tres planchas de porex
(el de las bandejas de alimentación nos puede servir
perfectamente). Una para la pared y dos para el suelo. Estas dos
últimas serán de distinto tamaño, la inferior dos centímetros más
grande en los lados y el frente que la superior. A la superior le
haremos además una caja en la parte interna del tamaño de la caja
de tornillos para después encajarla y que haga las veces de pilón.
Pegamos todas las partes: ambas
plataformas entre sí, posteriormente la cajita* y por
último pegamos la pared.
Una vez hecha la estructura ya sólo
nos queda pegar las piedras que ya tenemos preparadas para formar
el muro y el pilón.
Tallamos las piedras del suelo con
el punzón de punta roma.
(*
Utilizamos
la cajita para que haga de recipiente del agua artificial y no
haya filtraciones por las que pueda escabullirse hasta que haya
solidificado.)
Cortamos el porex amarillo en
taquitos del tamaño apropiado para las piedras que formarán el
muro del lavadero y el pilón. Les lijamos las aristas para que
queden redondeadas y después golpeamos con el cepillo de cerdas
metálicas para darle la textura de la piedra. Por último las cortamos a la mitad
longitudinalmente.
El pilón lo podemos formar con una
cajita de plástico. En este caso y por el tamaño de las figuras
he utilizado un estuche de tornillos y lo forramos con las
medias piedras de porex, tanto por dentro como por fuera.
Para las vigas usamos un listón de
madera de balsa. Suavizamos un poco las
aristas con la lima y aplicamos muescas en la madera para simular
el paso del tiempo y las pegamos a la construcción. |