Es una fiesta de origen franciscano, se
celebra desde 1263 a iniciativa de San Buenaventura, y el Papa Urbano VI
la hizo universal. La fecha elegida para su celebración es el 31 de
mayo, para que esté situada entre las fechas de la Anunciación y el
Nacimiento de San Juan y coincida con la liturgia de Adviento.
El texto evangélico (Lucas 1:36-39) nos
cuenta como María recibe la noticia, por mediación del ángel, de que
Isabel, su pariente, está esperando un hijo. Y como María rápida
emprende viaje para visitarla. Más adelante, en Lucas 1:40-42, se nos
describe la escena en la que Isabel recibe con alegría a María.
Pocos datos nos da el evangelista, tan
sólo que María sube presta a la montaña, dentro de la región de Judea a
visitar a su pariente. Muchos han sido los historiadores que han querido
situar la casa en varios emplazamientos: en Machaerus, unos 20km al
este del Mar Muerto, o en Hebrón, o en la antigua ciudad sacerdotal de
Jutta, o en Ain-Karim, al oeste de Jerusalén. Sin embargo, no se ha
encontrado en ellas ningún dato que nos pueda hacer pensar que alguna de
ellas fue la ciudad natal de Juan "El Bautista".
Tampoco disponemos de muchos datos por los
evangelios apócrifos, sólo el protoevangelio de Santiago hace mención al
relato de la Visitación (XII:1-3), que se ciñe a los hechos dados por
Lucas.
La representación, por tanto, corre por
cuenta de nuestra imaginación. El encuentro con Isabel presenta rasgos
de un gozoso acontecimiento, es un episodio familiar de una exquisita
ternura. La escena da pie a mostrar una suntuosa mansión con todo su
ajuar y multitud de detalles, incluidas las sirvientas, que se asoman
curiosas. No olvidemos que Zacarías, el esposo de Isabel, es
sacerdote.
El evangelista termina su relato de la
Visitación con las palabras: "María permaneció con ella como unos
tres meses y se volvió a su casa" (Lucas 1:56). Dado que el mismo
Lucas nos cuenta que en el momento de la Anunciación Isabel se encuentra
en el sexto mes de gestación, nos hace pensar que María estuvo con
Isabel durante el parto. Pero sólo son suposiciones, no hay nada que
constate tales hechos. |