Manuel Zambrana García, nació en Orihuela, Alicante. De
profesión sastre, su interés por el belén nació a temprana edad. A lo
largo de toda su vida, ha venido desarrollando y evolucionando sus dos
aficiones: el belenismo y el maquetismo.
Es una persona multifacética, al estilo del ideal
renacentista. Le interesa tanto la escultura, como el dibujo, la
pintura, el modelado, en definitiva todo lo relacionado con el Arte.
Además Manuel es autodidacta y esto, lejos de restarle méritos, se los
otorga.
Es Maestro Belenista por la Asociación Belenista de
Alicante, y miembro de las Asociaciones Belenistas de Alicante, Callosa
de Segura, Novelda y recientemente, de la Asociación Cultural “Amigos
del Belén de Orihuela” que ha formado con un grupo de amigos y de la que
además es presidente.
Si hay algo que está omnipresente en cualquiera de los
trabajos de Manuel es siempre el cuidado exquisito que presta hacia los
detalles. Además, una minuciosidad y realismo que rozan la perfección.
Esto se explica, con las palabras del propio Manuel: “soy un
perfeccionista, por eso trabajo despacio…prefiero poco y bueno que mucho
y malo”
Separar o desligar sus trabajos como maquetista y belenista
resulta casi imposible, puesto que para el Maestro Zambrana hacer el
belén es construir una maqueta de un pueblo, cueva o establo. Así es que
del Belén, nació su pasión por las maquetas.
NOTA: Sus maquetas han sido adquiridas por el Ayuntamiento
de Orihuela y se encuentran expuestas al público en el Museo
Arqueológico de San Juan de Dios y en el Museo de la Muralla.
Con Manuel hemos hablado sobre sus facetas como Maestro
Belenista, Artesano y Presidente de Asociación.
EL MAESTRO
Asinbe: ¿Cómo nació
en ti esta afición?
M. Zambrana:
Creo que desde que me
recuerdo he sentido esta afición.
A.:
¿A qué edad empezaste a hacer belenes?
M.Z:
El primer belén (del huevo frito) me lo hizo un primo – ya fallecido-
cuando tenía cuatro años, y ya después otro primo pintor siguió la
labor, y conforme me hacía mayor fui aprendiendo de él ayudándole hasta
que ya me lo hacía yo solo; aunque él me pintaba el celaje y las
montañas que las hacía con papel y “engrudo”. Claro mis belenes de
aquella época eran de aserrín, arena y papel de plata del chocolate el
río y las estrellas, como el de todo hijo de vecino. ¡Ah! y con
figuritas de cacharrería horrorosas, pero yo las veía muy bonitas.
A.: ¿Tienes algún
recuerdo especial de las navidades de tu infancia?
M.Z:
Montones, lo principal es que vivían mis padres y abuelas, y con mis
hermanas disfrutábamos de los dulces, el pavo, la misa del gallo, etc.;
y lo principal, de mi belén ¡Ah! Un año parió una ratita en la cueva y
tuve doble nacimiento, para mi fue bonito, no tanto para mi madre.
A.: ¿Hubo algún belén
que haya marcado tu trayectoria, algo que haya marcado tu estilo propio?
M.Z:
Si, uno primero cuando era niño, lo hacían los jesuitas tipo
dioramas pero se comunicaban unos con otros, me quede impactado por la
belleza y la técnica en que estaba hecho para aquella época. Y fue en
Villena –pueblo de mi “santa” (mi mujer)- que cuando nos hicimos novios
me llevó a ver dos belenes maravillosos. Yo en esa época ya no lo hacía
por ese estado de ánimo que nos entra con la adolescencia y te aleja
momentáneamente de todo lo que haces en la infancia, Villena es el mejor
núcleo de la provincia para hacer belenes –para mí claro, y no quiero
herir a nadie- me dieron un folleto de “Como hacer belenes” y fue allí
donde me volvió ese interés, afición o locura por el belenismo, pero ya
esta vez con los tintes artísticos que torpemente me atrevo ha realizar.
A.: ¿Definirías tu
estilo como perteneciente a una Escuela de Belenismo en concreto?
M.Z:
Hombre no creo que lo mío se merezca decir que tenga escuela, pero no
dejo de reconocer que me siento influenciado por Villena y la Asociación
de Alicante, a la que pertenezco.
A.: ¿Qué estilo de belenes te gusta más?
M.Z:
Mi preferido es el Histórico, y cuanto más riguroso sea con los tiempos
de Cristo, más me gusta. ¡Ah! y sin hacer ninguna concesión.
Aunque también he realizado dos belenes de estilo Regional,
uno en Callosa de Segura como colaboración para el cual, además, modelé
todas las cabezas de las figuras, y otro en casa como homenaje al
artesano Cuenca, de Murcia, en el año de su fallecimiento.
A.: ¿Cómo preparas el
belén? ¿Tienes un proyecto firme (boceto, fotografía, etc) y este es el
que te marca la pauta a seguir o, por el contrario, ¿sobre una idea
general vas desarrollándola sobre la marcha?
M.Z:
Pues si lo tengo muy claro, me hago un boceto como dices, y si solo es
una idea me pongo a realizarla y voy rectificando sobre la marcha. A
veces no tiene nada que ver con lo que quería hacer, pero eso también me
pasa con el boceto.
A.:
De todos los trabajos que se llevan a cabo en el belén, ¿qué es lo
que más le gusta realizar?, ambientación, luces, paisaje, edificios…
M.Z:
Todos me gustan, no sabría decir cual es el que menos, pero si te
digo que con las luces disfruto muchísimo.
A.: ¿Qué te parece la
nueva hornada de artesanos?
M.Z:
Muy buena, aunque ya escapan a mis posibilidades.
A.: ¿Qué opinas de
las nuevas escenas de la Sagrada Familia, que últimamente están
realizando casi todos los artesanos, en las que las expresiones
transmiten más calor de familia, son más humanas, más realistas?
M.Z:
Me parecen muy adecuadas, pues como dices son más realistas. Antes los
nacimientos eran más estáticos, de exposición diría yo, ahora son más
humanos y se acercan a lo que en realidad pasaría.
A.: Tu trabajo ha
sido reconocido en varias ocasiones. Se te dedicó una retrospectiva en
Novelda organizada por la Asociación Belenista de Novelda; eres, además,
Maestro Belenista reconocido. Cuéntanos, ¿qué otros premios o galardones
tienes?
M.Z.:
Tengo cinco primeros premios provinciales, uno local, y Premio
Federación Española por la Asociación de Callosa de Segura, y dos
primeros en los Certámenes de Belenes y Dioramas de Beniel.
Otra faceta que
queremos destacar de Manuel, es la de artesano. Además de modelar sus
propias figuras, las transformaciones que hace con otras son
sencillamente magistrales.
EL
ARTESANO
A.: ¿Cómo, cuándo y de qué manera empieza tu trayectoria como escultor?
M.Z:
La definición de escultor me parece exagerada. No recuerdo bien, pero
sería muy pequeño cuando empecé a hacer cosas diversas -figuras,
animales, flores, etc.- con barro del río (por cierto salía a una “dosis
de zapatilla” diaria, porque mi madre temía que me cayese en él, pero yo
“erre que erre”.
A.: ¿De qué manera entraste en el mundo del modelado de figuras de
belén?
M.Z:
Por cuestiones económicas, tenía figuras baratas dentro de lo que cabe,
pero quería las de Mayo y mi salario de entonces no me alcanzaba para
ello, y decidí hacérmelas yo tomando como base la película “Jesús de
Nazareth” de Cefirelli, y aunque un poco burdas –no tengo escuela-
fui haciéndome un belén completo de 11cm. Desde la anunciación a María
hasta la huida a Egipto, pasando por todos los misterios de la infancia
de Jesús, y uno poco visto son los desposorios.
A.: ¿Te acuerdas de la primera pieza que modelaste para un belén?
M.Z:
Si, fue la Virgen de la anunciación, sin ángel, de este sólo puse una
silueta reflejada en la pared.
A.: ¿Cuántos años llevas modelando figuras de
belén?
M.Z:
Veintitantos, desde el 86 solamente.
A.: ¿Cuál es la obra más original o diferente que has hecho?, de
aquellas que digamos rompen moldes. ¿La hiciste por gusto o por encargo?
M.Z:
El Cristo de la caída, aunque pobre, una copia de Salzillo, la hice para
mí, sin que nadie me lo pidiera.
A.: De toda tu creación, ¿de qué pieza o conjunto te sientes más
satisfecho?
M.Z:
De las que hice para sacarles el molde y hacerlas en bronce, van
incrustadas en el trono del Calvario, son 8 santos afines a mi pueblo de
23cm. y una de 40cm. de la Virgen.
A.: Además de las figuras modeladas, también haces retoques o
transformaciones a algunas figuras. Los resultados, son más que
sorprendentes y extraordinarios. ¿De dónde te viene la inspiración? ¿Qué
es lo que te hace querer modificar la figura?
M.Z:
Del afán por comprobar de lo que soy capaz de hacer, y de querer tener
más figuras. Me las compro repetidas y una la reformo hasta conseguir
tener otra distinta, pero del mismo estilo.
A.: Después del retoque, hay que pintar. ¿Qué técnicas sueles usar de
forma habitual? ¿Es porque te sientes cómodo con la técnica en cuestión,
porque te resulta fácil o te guías más por los resultados que esperas
obtener?
M.Z:
Le doy una imprimación si es de marmolina o, a las partes que transformo
si son de arcilla, y a pintar se ha dicho, con acrílicos las figuras de
belén y oleos las demás imágenes, en cuanto a los resultados, yo mismo
me sorprendo más de una vez (aunque este mal decirlo).
A.: Sin duda no todo es técnica, también está el buen hacer del pintor.
Lo que me lleva a preguntarte ¿De dónde sacas los modelos para pintar, o
es pura inspiración? ¿Cuál es el criterio por el que te basas para
elegir los colores?
M.Z:
De la película
antes citada, y mejor aun de un libro, “Los Evangelios Concordados
Ilustrados, con ilustraciones de William Hole, fuente de inspiración de
Castell y de Mayo y un tesoro para nosotros los belenistas. Los tonos
los consigo haciendo mezclas, no me gusta pintar con el color tal cual
sale del tarro.
Como hemos reseñado al principio, Manuel ha formado junto con otras
personas, la Asociación Cultural “Amigos del Belén de Orihuela.
Conozcamos su opinión como presidente de asociación.
PRESIDENTE
A.: ¿Cómo llegaste a ser presidente de la asociación?
M.Z:
Al no haber nadie (había dos personas pero han fallecido) que quisieran
llevar esto para adelante, he decidido hacerlo yo, con un poco de recelo
por parte de mi mujer.
A.: ¿Qué sistema utilizan en su asociación para elegir los cargos?
M.Z:
Nos reunimos unos cuantos amigos –algunos no son belenistas por eso nos
denominamos Amigos del Belén, ahí caben los que hacen belén y los que
solo miran - y nos repartimos “los papeles” cuando se cumpla el mandato
se elegirán por votación democrática.
A.: ¿Son muchos los socios actualmente?
M.Z:
Oficialmente somos pocos, unos veinte, pero no hemos hecho ninguna
reunión ni propaganda de la asociación todavía, estamos esperando un
local que nos tiene prometido el ayuntamiento, porque estamos legalmente
constituidos, sin esto difícilmente saldremos adelante.
A.: ¿Qué tipo de actividades tenéis pensadas realizar en la asociación?
¿Cuáles son los objetivos?
M.Z:
De momento solo hacemos de jurado del concurso local de belenes, cuando
tengamos el “dichoso” local, haremos un mini museo de belenes y
dioramas, e impartiremos cursillos de belenismo más o menos con lo poco
que sabemos. Nuestro mayor interés es mantener viva esta afición por el
belén, tan nuestra, tan tradicional y tan bonita, como me dijo una
persona un día, viendo un belén mío: “¡aunque esta historia no
hubiese existido, es tan bonita que merece la pena revivirla!”
Pero quiero remarcar
que, el belén es, ni más ni menos que la conmemoración del Nacimiento de
Jesús, para algunos claro.
A.: ¿Qué consejo le
darías a una persona que se interesa por el mundo del belén?
M.Z:
Que no le de miedo entrar en este mundo, verá que es maravilloso y le
colma de satisfacciones.
A.: ¿Cómo ves el
belenismo actualmente?
M.Z:
Como nunca, tiene un creciente auge que no veía antes, a pesar de los
tiempos que corren y no solo en nuestro país.
A.: ¿Cómo ves el
futuro del belenismo? ¿Cree que hay suficientes jóvenes interesados en
el belenismo para que la tradición se mantenga?
M.Z:
Yo creo que muy potente y seguro, yo juzgo por el Foro de Belenismo y
por mi pueblo, cada vez se ponen más belenes de gente joven.
A.: ¿Cómo ves el
belén con todas las nuevas tecnologías? Internet se ha convertido en una
utilísima herramienta de trabajo para todos los sectores. ¿Qué opinión
tienes de la labor que está realizando la ASINBE a través de su web en
la difusión del belenismo?
M.Z.:
Creo que son muy importantes las nuevas tecnologías a través de
internet, pues así estamos al día con todos los adelantos y técnicas que
salen a diario, en cuanto a ASINBE reconozco que esta haciendo lo
indecible por eso, por difundir el belenismo e interesar cada vez más
tanto a los ya iniciados como a los novatos, espero que siga así para el
bien y el futuro del belén. |