Había una vez una joven llamada
Navidad, cuyo origen había sido el de una sirena, desde que era
pequeña sus padres sirénidos murieron al ser heridos por un barco
pesquero, la pequeña bebé fue arrastrada por las corrientes, siendo
rescatada en el polo Norte cuando parecía que moriría congelada,
aquel día un osito polar que nadaba por el lugar encontró una
pequeña canastita flotando en las heladas aguas, era una bebé
sirénida, el osito amigo de Papá Noel la llevó a casa del anciano
que al verla gélida e inconsciente, hizo un hechizo mágico,
transformando a la bebé en una pequeña hada de ensueño, desde ese
momento fue adoptada por la familia Claus.
Al pasar de los años los ancianos Claus
se vieron recompensados por la sirénida jovencita que se consagró a
cuidarlos, era muy tierna con los animales a quienes protegía aun a
riesgo de su vida, ayudaba a los desamparados siempre con una bondad
inigualable, dando a manos llenas todo lo que estaba al alcance de
sus posibilidades, enseñaba la palabra de Dios que era el eje de su
corazón puro y cristalino.
Navidad vivía junto a su abuelos
adoptivos en el Polo Norte, en una casa que estaba llena de magia,
allí estaba la juguetería donde los duendecillos fabricaban los
juguetes para las navidades, un establo acogedor donde dormían los
renos y que navidad cuidaba con mucho amor, nunca les faltaba ni
alimento, ni un cepillado en sus suaves pelajes, ni las caricias de
la dulce joven.
Vivía retirada de la aldea ya que el
país de los juguetes donde ella vivía estaba en un lugar recóndito
del Polo Norte, Navidad iba a los lugares donde se necesitaba ayuda
ya fuera niños desamparados, ancianos pobres y enfermos, animales
lastimados o en abandono, poseía una esfera mágica que le permitía
ver lo que sucedía y mágicamente con su esfera aparecía cual ángel a
prestar su ayuda desinteresada por lo que era conocida como el ángel
de la navidad.
En una ocasión en que era prenavidad,
nuestra joven heroína vio en su esfera mágica a un príncipe de una
tierra lejana que estaba en peligro de muerte había sido cautivo por
defender su pueblo del abuso del rey que era su propio padre cuyo
corazón estaba lleno de egoísmo y ambición, ese día el joven
príncipe se puso en contra de su padre por defender a su pueblo,
siendo cautivo por el rey en las mazmorras del palacio real, ahí
había sido torturado hasta quedar casi moribundo, en medio de su
delirio el joven príncipe invocaba al niño Jesús que lo protegiera,
y salvara su vida.
Navidad sabía perfectamente que aquel
lugar lejano estaba fuera de sus posibilidades de llegar a través de
su esfera mágica y que ir significaría perder parte de su energía
vital, aun así Navidad se lo explicó a sus abuelos quienes lloraron
junto a la joven temiendo perderla para siempre, ella los abrazo
fuertemente sabiendo que su vida quizás se evaporaría por salvar al
joven príncipe, así utilizó todas sus energías mágicas y llegó junto
a él, en la mazmorra yacía inconsciente, ella puso sus manos mágicas
sobre él curando sus heridas, al rato sus ojos se abrieron topándose
con la mirada de la joven doncella, sus corazones enseguida se
identificaron, dos almas que estaban predestinadas para el amor puro
y verdadero.
Enseguida el joven príncipe acarició el
blanco rostro de la joven y perdiendo su mirada en los azules ojos
de Navidad, mientras con su otra mano acariciaba la dorada cabellera
de la chica y un beso posó en sus delicados labios, era ya casi la
víspera de nochebuena en ese beso cálido de los enamorados
mágicamente estaban enlazados por el sortilegio del amor, en un
instante Navidad ocupó su última energía de magia destellando amor,
compasión, humildad, bondad en el endurecido corazón del rey que fue
en busca de su hijo.
La joven desfalleció su último hálito
de vida en los brazos del joven príncipe, había ocupado toda su
energía mágica y aún más su propia vida para salvar a su amado y
devolverle la bondad al rey, era el dulce ángel de navidad que
entregó su vida por el amor, empezó a nevar y el joven príncipe
junto al rey lloraban cerca del cuerpo inerte de Navidad, nació el
niño Jesús y la luz mágica de la estrella de Belén iluminó a Navidad
ante la mirada atónita del rey y el príncipe, la joven doncella abre
sus ojos y el príncipe la abraza enamorado, la pareja real
contraería nupcias en víspera de la navidad todo era alegría, un
traje de alborada vestía la pequeña Navidad, Papá Noel llevaba del
brazo a Navidad sonaban las campanas y la novia cubierta de aurora
entraba al altar allí la esperaba el amor y juntos vivirían felices
para siempre y colorín colorado este cuento se ha terminado. |